martes, mayo 05, 2009

<
LO QUE NO QUERIA QUE PASARA


Y resulta que pasó justo lo que no queria que pasara;
lo que venía evadiendo desde la primera vez que te vi
mientras esquivaba tu sonrisa y reprendía a mis ojos
que te buscaban ansiosos cada domingo en las mañanas.

Me senté a tu lado aquella tarde y charlamos
y fluyó la plática como si nos conociéramos de antaño.
Sujeté tu mano y desee no tener que soltarte;
tu calidez estremeció mi corazón.

Sucedió después que me gustaron tus bromas,
mis sentidos despertaron a tus detalles;
mis pies caminaron el primer paso para buscarte, para guiarte,
y desde entonces mi mente buscó pretextos para nombrarte.

¡Pasó justo lo que no queria que pasara!
pues te pienso no sólo los domingos por la mañana
si no también los martes, los miércoles, los sábados;
al despertarme, al dormirme, cuando leo o cuando trabajo.

Sucedió que no me basta con pensarte, mirarte o saludarte
pues te deseo a cada instante a mi lado.
Agonizo entonces toda la semana esperando
esa inyección de energía que me brinda tu abrazo.

...

Y resulta que pasó justo lo que no quería que pasara,
fue un descuido, un roce con el mundo que me fue negado.

Sucede pues que usted me gusta,
me gusta demasiado.

Winter.


Perdone si mis versos son arrítmicos, antiestéticos ó poco elocuentes pero mientras pienso en usted, todo lo demás pierde valor.

0 Comments: