INVIERNO
Como ahora, estoy cansada. Cansada de todos, de todo, de mí...
Cansada de los mismos lugares, de los mismos misterios, de las mismas carencias y aún más de las apariencias. Cansada de las expectativas; de las que tengo y de las que tienen de mi. Cansada de perseguir, de huír.
Etoy cansada de saber que no tengo nada pero aún así no entenderlo. Cansada de tomar esas pastillas que me provocan náuseas todas las tardes, de llorar sin motivos (realmente sin motivos), de extrañar a "alguien" cuyo nombre ni siquiera puedo recordar ... o es quzá que nunca lo he sabido; estoy hecha una maraña de emociones.
Ya quiero que todo pase, que este hastío no se desborde. Quiero tener el control de mi misma otra vez: llorar porque sufro, reír porque gozo.. o llorar de alegría y reír por nerviosismo. Como sea, pero quiero ser yo otra vez. Quiero olvidarme de los horarios, de los temores. Quiero recobrar la paz.
Estoy tan harta de este mundo que me niego a abandonar...
Y estoy sola. Tan sola... rodeada de amigos, pero sola.
Es el momento de romper lazos frágiles, de hacerle doble nudo a los ya fuertes.
"Drop a star! Drop a Star! "
Tal vez comience la nueva canción que me lleve a la orilla del mar...
Dios! Dios! ven conmigo
¿Cuál es el rumbo en que debo navegar?
Quiero olvidarme de horarios, quiero que todo esto pase ya.
rompe mis cadenas, repara mis alas
Libertad, libertad!!
Escucha mi silencio...
Mi clamor ahogado...
"Drop a Star! Drop a Star !"
Tal vez tu canción mengüe mi debilidad
Silencio....
Yo sé que no pasa nada. Yo sé que no pasa nada. Yo sé que no pasa nada. Yo sé que no pasa nada. Yo sé que no pasa nada. Yo sé que no pasa nada.
Gioconda Belli
Este sueño que vivo,
esta nostalgia con nombre y apellido,
este huracán encerrado tambaleando mis huesos,
lamentando su paso por mi sangre...
No puedo abandonar el tiempo y sus rincones,
el valle de mis días
está lleno de sombras innombrables,
voy a la soledad como alma en pena,
desacatada de todas las razones,
heroína de batallas perdidas,
de cántaros sin agua.
Me hundo en el cuerpo,
me desangro en las venas,
me bato contra el viento,
contra la piel que untada está a la mía.
Qué haré con mi castillo de fantasmas,
las estrellas fugaces que me cercan
mientras el sol deslumbra
y no puedo mirar más que su disco
-redondo y amarillo-
la estela de su oro lamiéndome las manos,
surcándome las noches,
desviviéndome,
haciéndome desastres...
Me entregaré a los huracanes
para pasar de lejos por esa luz ardiendo.
Estoy muriéndome de frío
