Hoy... amanecí sin fuerza. Despierto, a las 8:15 de la mañana, me exalto, debo estar en mi trabajo a las 830 así que apresuradamente me levanto y me voy directo a la regadera, es entonces que me doy cuenta de que estoy mareada. No hay agua caliente así que debo soportar el chorro helado sobre mi cuerpo, lo agradezco, porque me ayuda un poco a despertar, a ubicar mi espacio. Automáticamente me visto, tomo las llaves del auto y salgo apresurada hacia la oficina, pero el mareo no desaparece. Me duele la cabeza. Extrañamente sólo llego 10 minutos tarde al trabajo pero no me puedo concentrar.

Son las 12:00 y después de un café cargado, una cafiaspirina y una "coquita" el dolor se ha pasado pero no el mareo. Es una sensación extraña, como si alguien clavara sus dedos en mi nuca y la meciera de un lado a otro. Sigo sin poder concentrarme, tan sólo he hecho algunas llamadas y checado pagos. Llega un cliente, debo sonreír y atenderlo amablemente. No me pasen llamandas, por favor. Hoy, quisiera haberme quedado en mi cama, dormida, sin tantas ideas demabulando por mi mente. Ni siquiera puedo escuchar música.

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Ayer, a las 4 am, falleció la hermana de una de mis cuñadas, con quien también tuve mucho trato. Falleció luchando contra el cáncer de seno, asesino silencioso que ataca suavemente pero cuando tiene a su presa entre sus garras, la destroza poco a poco, causándole gran dolor tanto físico como emocional ( si es que existe el término) ... le deja ganar algunas batallas, pero no la guerra. No. O lo detienes en cuanto llega a terreno enemigo o invariablemente gana la guerra.

Ella, murió a la edad de 40 años. Le sobreviven 3 hijos ( la menor de tan sólo tres años) y su esposo (que nunca fué apoyo para ella). Le detectaron el cáncer de seno a pocos meses después de haberse embarazado, le pedían que abortara, pero ella decidió seguir adelante; ¿cómo podría quitarle la vida a su propia hija? Toleró innumerables sesiones de quimioterapia, operaciones (después de que el cáncer se esparció) , nunca se dió por vencida. Seguia trabajando, manejando -aún con los dedos de manos y pies quemados por el tratamiento- , cuidando a su pequeña y atendiendo a sus otros dos hijos adolescentes. Nunca se quejó, no queria que la trataran lastimosamente, como a una desahuciada. Hace poco veníamos de Chihuahua, en camión, ella sus hijos y yo. Ella estaba mareada, no podía sostenerse bien en pie. Me ofrecí a cuidar a su niña para que descansara pero se negó, no queria dormirse, tenia miedo de no despertar. Luchó siempre por sus hijos, dió la vida por ellos. Finalmente el cáncer le ganó después de 3 años de agonía. Ahora descansa en paz, sin dolor, sin preocupaciones.

Mujeres, debemos quitarnos la pena de ir con el ginecólogo (la ...a) . Hacernos el hábito de autorevisarnos, de hacer la exploración de los senos axilas cada 10 días después de iniciado el sangrado de la menstruación. Mi conocida era una mujer que se cuidaba, se alimentaba sanamente, hacia ejericicio.. incluso habia ido con el ginecólogo unos meses antes de que le detectaran su enfermedad. Una vez vi un anuncio publicitario de un laboratorio de medicina que decia algo así como: " el 80% (no recuerdo exacto) de las personas que se sienten mal, prefieren morirse antes de ir con el médico.... y lo hacen". Dejemos la decidia, el "después se me pasa"... cuidémonos.

Aquí les dejo una poesía que hicieron en honor a Soraya, la cantante, pero que no por eso pierde su universalidad.

Que nunca muera la fe.

Hoy el monstruo ataca con fuerza

su puño castiga al débil, al indefenso

su crueldad arrebata la vida de un ángel

apaga la voz de una doncella

y lágrimas se derraman en su memoria

mientras cientos de corazones laten con fuerza

por la estrella que con canciones nos bendecía.

Hoy se pierde otra batalla en la larga guerra

que las perlas de Dios enfrentamos

seno que acoge al recién nacido

fuente de vida, de amor, de consuelo

trampa inocente en el nuevo milenio

túnel secreto al más allá, a otro universo.

Que nunca muera la fe, la esperanza

las ganas de luchar, de estar unidas

de ser más fuertes que la enfermedad

y que la muerte misma.

Abracémonos como hermanas

y coloquemos nuestras manos muy juntitas

ayudemos a quien lo necesita

salvemos una vida en memoria de las heroínas

que hoy quedan en el camino

que hoy nos regalan su última sonrisa.

Autor: (`·.Arwen¤Undomiel.·´)